¡Muchacho! ¡Muchacha! ¡O muchache!
Buenos días a mis queridos amigos de la membresía.
Como esta es la primera edición hoy os regalaré un texto extenso para soborear y digerir lentamente sobre uno de mis temas favoritos: La obsesión.
No aquella que sientes hacia tu vecina o la chica/o/e que te gustaba de pequeño/a/e.
La obsesion buena.
La que te cambia la vida.
El mensaje principal de esta carta es este: un año de obsesión puede cambiar tu vida para siempre.
Imagina.
Un jodido año de obsesión.
365 dias de obsesion y trabajo duro.
Para que dejes de desear y empieces a querer.
Porque no es lo mismo desear que querer querido lector.
Desear implica imaginarte lo feliz que serias con eso que quieres.
Quererlo es saber que necesitas eso en tu vida.
Desear es que, bueno. te gustaria en algún momento tener algo…
Pero querer es saber que estas dispuesto a obsesionarte por ello y a conseguirlo aunque te salgan yagas en el cerebro.
Aquí te cuento cómo se ve un año salvaje de obsesión:
Obsesión es una idea poderosa.
La mayoría de la gente pasa su vida en un traje de pijama sosteniendo un platano.
Esperando que alguien les dé permiso con un plan tibio.
Sin urgencia.
Sin acción.
Aburridos.
La obsesión explota la forma normal de vida.
Una vez que experimentas su poder, te sientes más alto que una cometa.
El significado de la vida cambia.
Tu sistema operativo vital se corta en pedacitos con una espada samurái.
Solo necesitas un año de obsesión para convertirte en un ser humano extraordinario.
Así es como se hace.